El presidente Alejandro Giammattei anunció hoy el inicio de operaciones áreas en labores de asistencia humanitaria y rescate de víctimas de las lluvias asociadas al ciclón Julia que entró degradado al territorio nacional este día.
El mandatario, acompañado de sus ministros, encabezó una reunión en que las autoridades de la Coordinadora Nacional de la Reducción de Desastres (Conred) presentaron un informe preliminar sobre la situación del fenómeno natural que al entrar al país se degradó a Depresión Tropical y se disipó sobre la región occidente.
Sin embargo, las condiciones de lluvia generadas por Julia continuarán probablemente durante las siguientes 72 horas, se indicó en una rueda de prensa que siguió al informe preliminar de Conred efectuado la tarde de este lunes en la sede de la institución.
El ciclón tropical Julia “salió del territorio nacional, donde se degradó. Pero lo que más preocupa es el remanente”, es decir, se esperan lluvias copiosas que son potencialmente peligrosas por los terrenos que ya están saturados, indicó.
Dijo que, no obstante, se esperaba una baja en la intensidad de las precipitaciones mañana martes, cuando se evaluará la situación y comenzarán los primeros vuelos de helicópteros que asistirán y rescatarán a posibles víctimas de inundaciones y derrumbes.
El presidente Giammattei reiteró que funcionó el sistema de alerta temprana, que emitió el gobierno desde el jueves pasado cuando se pronosticaba el impacto de un poderoso ciclón.
En este sentido afirmó que las autoridades también se prepararon para atender la emergencia, pues las instituciones han respondido de una manera más ágil y efectiva, por ejemplo en relación con las tormentas Eta e Iota que en su momento causaron una gran devastación en el país.
Recalcó que con la alerta temprana también se comunicó a la población, por lo que posibles comunidades en riesgo que habitan en la zona de las cuencas de los ríos estuvieran atentas para buscar tierras altas.
Señaló que, según especialistas de Conred, esta reacción de las comunidades en riesgo que buscaron ponerse a salvo en tierras altas o en albergues cuando arreciaron las lluvias es la razón de que la mayoría de los afectados sea por derrumbes y deslaves y no por inundaciones.
El mandatario indicó que el martes se llevará a cabo una reunión del Grupo de Ayuda Humanitaria, conformado por embajadas y organismos internacionales, que estudiarán los daños en Guatemala – de víctimas, damnificados y de destrucción de infraestructura- para determinar la ayuda que se deberá poner a disposición del país.
El titular de Conred, Óscar Cossío, en su informe preliminar dijo que el mal tiempo afectó a 436 mil 112 personas, mientras que mil 77 personas son atendidas en albergues y se lamentan 13 personas fallecidas, principalmente por derrumbes en Santa Eulalia, Huehuetenango (ocho decesos) y Panzós (cinco), Alta Verapaz.